10 de abril de 2009

Hacia un Crecimiento Regional Igualitario


Dentro del contexto ideológico en el cual se ha desarrollado la descentralización, se apunta principalmente a un federalismo descentralizado esquema de organización política en la cual las actividades de gobierno están divididas entre un gobierno federal y gobiernos constituyentes, de manera que cada nivel tiene a su cargo algunas actividades sobre las cuales toma decisiones que son finales.Todos los asuntos de interés nacional, la máxima libertad individual se alcanza cuando las decisiones políticas son tomadas a nivel nacional; mientras que para todos los temas de interés local, esto ocurre cuando las decisiones políticas son tomadas a nivel local.[1].

De acuerdo al párrafo anterior, la idea aplicada al caso de Chile, la descentralización se entendería como un Gobierno central que a través de los Gobiernos regionales controla el territorio por medio de la aplicación de políticas o programas que vayan en beneficio de la población así como también en mejoramiento del sistema y gestión de las autoridades suponiendo que las decisiones de orden regional sean tomadas por las autoridades correspondientes. Otro punto a considerar es que este sistema federado (ó descentralizado en el caso de Chile) permite la resolución de conflictos en un periodo de tiempo menor a que si dependiera de una oficina central dar solución.

Por ello, se agrega un nuevo término que se desprende de la Regionalización, es la delegación que corresponde a la transferencia de las responsabilidades de gestión sobre funciones específicamente definidas hacia organismos que están fuera de la estructura burocrática regular, o sólo indirectamente controlados por el gobierno central[2]. Por lo tanto, los Gobiernos regionales juegan un papel importante al momento de la toma de decisiones que involucran una fracción del territorio nacional, puesto que de ellos depende el funcionamiento óptimo del territorio regional, por lo que su capacidad de autogestión debe ser la mejor, por lo mismo, es que se han implementados proyectos de capacitación del personal con el objeto de que su gestión sea la más adecuada.

Mencionando la descentralización, se agrega que existe un descentralización de fiscal que apunta al incremento de ingresos o implementación de políticas regionales que vayan en beneficio de un aumento de los recursos regionales para su propio desarrollo y crecimiento.

En resumen, la analogía del sistema federal con la descentralización implica que el Gobierno central puede transferir recursos, autonomía de decisiones y poder a los organismos públicos, quienes deben procurar la entrega de bienes y servicios de forma eficiente y efectiva, así como también satisfacer las demandas inmediatas de la población, pero a la vez tiene la tarea de fiscalizar, diseñar, financiar las actividades que se desarrollen dentro de los límites regionales.

En el marco legislativo que promueve el desarrollo de territorios extremos, en los últimos 18 años, se ha considerado su desarrollo para que crezcan en forma igualitaria con el resto de las regiones centrales y para lograr ello es que se han impulsado leyes con incentivos económicos, dentro de los cuales se pueden mencionar los más relevantes: pasos fronterizos, ingresos tributarios para la región, zonas francas, subsidios a profesionales que trabajen en zonas extremas, becas escolares y la oferta de oportunidades laborales y/o emprendimiento a etnias localizadas. Si bien, todas estas propuestas nacen desde el Poder Ejecutivo, es responsabilidad de los parlamentarios que se puedan llevar a cabo, ya que como es sabido un proyecto de ley puede ser aprobado o rechazado, o bien modificado. Sin embargo, existe una ley que fomenta la creación de los Consejos Regionales, los cuales refuerzan las políticas descentralizadoras y que tienen como tarea principal la planificación del desarrollo regional, por medio de pequeñas cantidades de dinero que serán dispuestas por medio de inversiones públicas o privadas, las cuales al ser productivas incrementan el nivel de desarrollo nacional.

Otra de las funciones de los Gobiernos Regionales, es el resguardar el Ordenamiento Territorial ya que es de importancia asignar funciones al espacio para que se incremente el desarrollo y supere las dificultades que se pueden presentar al momento de iniciar una nueva actividad. Particularmente, el ordenamiento territorial se refleja en el cumplimiento de las normativas que regulan el uso del suelo, áreas urbanas y su expansión, cumplimiento de las normas ambientales y la aplicación de programas que consideren el uso aprovechamiento adecuado de los recursos naturales que disponga cada territorio regional. Así como también la implementación de políticas de orden social[3].

Finalmente, hoy en día aún existen territorios que tienen mínimas condiciones para aumentar su crecimiento y desarrollo, son los territorios desvalidos, altas tasas de desempleo, población en condiciones de extrema pobreza, escasa accesibilidad, aislamiento y que no reúnen las condiciones mínimas para ser al menos rurales. Para apalear esta situación, es necesario que se concreticen todas las acciones que ayuden a su fortalecimiento, principalmente en la entrega de los recursos necesarios para que todas aquellas demandas se traduzcan en proyectos concretos que vayan en beneficio de la población y la valorización del territorio.

En la imagen siguiente se muetra la relación entre el poder Legislativo y el Gobierno central por medio de los Gobiernos Regionales para lograr el crecimiento igualitario entre cada región y los elementos que influyen en cada uno de ellos.







[1]Descentralización: una definición y una evaluación de la agenda legislativa chilena (1990-2008)”. Mardones, Rodrigo. Documento digital disponible en: http://www.scielo.cl/scielo.php?pid=S0250-71612008000200003&script=sci_arttext

[2] Ídem

[3] “El Proceso de Descentralización en Chile”. SUBDERE. Documento digital, disponible en http://www.subdere.gov.cl/1510/article-65835.html

5 de abril de 2009

Regionalización y Territorio

El proyecto de Regionalización tiene sus primeros antecedentes antes del Gobierno Militar impuesto en 1973, ya que las primeras propuestas fueron hechas en el bajo el mandato de Eduardo Frei Montalva, a través de la Oficina de Planificación Nacional (ODEPLAN), la que fija 3 objetivos fundamentales[1]
El siguiente cuadro muestra los objetivos y
los principales aspectos que se pretenden abarcar




-Económicos: Busca acelerar el crecimiento regional medido en el Producto Geográfico Bruto (PGB), lo que significa un aporte al crecimiento nacional, redistribuir los ingresos beneficiando a los sectores más pobres de población, aumentar el empleo regional, disminuir la inflación y mantener un rango de endeudamiento externo que sea posible pagar.

- Social: Se enfoca en la mejora e implementación de aspectos de educación, salud, justicia, vivienda, participación de la comunidad local y mejoramiento de la relación empleador – empleado

- Integración Nacional: Junto a los objetivos anteriores, se promueve la integración nacional bajo condiciones de incorporación de población a las decisiones del país, acceso a la educación en todo Chile, mejoramiento del acceso a los lugares más aislados y extremos para así, estimular la actividad económica que beneficie al país completo.

Por lo mismo, es que persiguiendo la realización de estos 3 objetivos se busca fomentar el desarrollo económico a través de un crecimiento auto-sostenido que impulsa por medio de políticas, planes y programas para que cada región cuente con los recursos necesarios para lograr este fin.

La propuesta de crear unidades de territorio que se considerarán como Regiones político-administrativas, es la proyección de crecimiento de población en un periodo de 25 años[2] y para que este crecimiento no fuera concentrado en la zona central del país (Santiago y alrededores) se impulsó el movimiento de población hacia sectores con menor densidad poblacional. En este aspecto, fue de importancia la localización de recursos naturales que permitieran la extracción y posterior procesamiento de materias primas que fomentaran la creación de mayores puestos de trabajo y a la vez, inspire seguridad de mejoramiento de calidad de vida.

La accesibilidad a los sectores más alejados y extremos de la capital, fue resuelta por medio de la construcción de nuevos sistemas viales (con uso de materiales más resistentes) y la extensión de las líneas ferroviarias que disminuyera el tiempo de traslado de mercadería desde los centros de producción hacia los de consumo. Debido a ello, es que el territorio nacional se conectó y luego integró con la generación de nuevos centros poblados.

La llegada del Gobierno Militar en 1973, enfocó la Regionalización como una “Modernización”[3] y esta vez fue dirigida por la Comisión Nacional de Reforma Administrativa (CONARA), la cual impulsó el desarrollo regional mediante la entrega de recursos provenientes de la Administración central con el objetivo de dar un inicio a las actividades que fomentaran el crecimiento regional. Los fondos más importantes son el Fondo Nacional de Desarrollo Regional (FNDR) y el Fondo Común Municipal, el primero por ley de Presupuesto, es obligación del Estado entregarlo a cada región. El segundo, es producto de la recaudación de impuestos que van directamente a los Municipios. Con ello, lo que se busca incentivar es la Inversión tanto pública como privada, para así promover la actividad regional la cual es medida por el PGB lo que contribuye al crecimiento y desarrollo regional y nacional, de esta forma se disminuye el desempleo regional, disparidad entre regiones y favorece el consumo de la población.

El proceso de Regionalización, permitió a los territorios adquirir un significado o funcionalidad al tener dentro de sus límites actividad industrial concentrada, comercio, intercambio de bienes y servicios y la presencia de Organismos e Instituciones descentralizadas que resolvieran los problemas de la población sin necesidad de desplazarse a Santiago, desde esta perspectiva es que se puede decir que el territorio adquirió cualidades, dentro de ellas, las más destacables son:

- Auto-sostenible: Por medio de la generación de recursos propios que le permitan su auto-gestión

- Autonomía: La capacidad de toma de decisiones a menor escala evita el sistema burocrático de la capital.

- Desconcentrado: La presencia de organismos e instituciones que resuelvan los problemas de la población.

Con respecto a la autonomía en cuanto a su funcionamiento, crea lazos de integración al existir una continuidad de actividades que realiza una región y otra, por lo que la división geo-política so consideraría sólo para efectos administrativos.

La creación de Polos de Desarrollo que son fácilmente identificables en el territorio es la constitución de macro regiones con funciones específicas, que hace inferir que se ha dado un logotipo que la hace reconocible a nivel nacional, otro factor que se presenta en esta clasificación es la cercanía a los recursos naturales que presente cada macro región.

Por otra parte, el desarrollo que pueda alcanzar un región en cuanto a técnicas extractivas y procesamiento de materias primas favorece la externalización de los productos por medio de exportaciones, fuente importante generadora de recursos económicos para la región.

Finalmente, al observar el territorio como unidad, a escala menor, es posible distinguir que cada región posee características propias las cuales han sido orientadas a la entrega de servicios, concluyendo que el cambio ha sido notable en la funcionalidad del territorio: de ser extractivo – procesador a terciario, esta cualidad puede ser identificada en los diversos planes de turismo que en temporada estival son los que aportan mayor flujo económico y durante el resto del año, la educación universitaria se ha convertido en un foco de importancia en cuanto a la generación de servicios derivados de ella y con ello, el aumento de recursos para la región.

En la siguiente imagen se muestra la relación entre los conceptos anteriormente mencionados




[1] “Política de Desarrollo Nacional. Directivas Nacionales y Regionales” ODEPLAN. Santiago 1968

[2] “Reforma Administrativa Integral de Chile y el Proceso de Regionalización”. Juan Barrientos V. Viña del Mar 1979. Disponible en: http://www.subdere.gov.cl/1510/articles-68995_recurso_1.pdf

[3] “La Regionalización” Augusto Pinochet U. Disponible en: http://www.subdere.gov.cl/1510/article-68994.html